sábado, 3 de mayo de 2014

“La paz sea con ustedes”

 
10 meses fuera de México, ¡ha sido un tiempo tan intenso y con tantos retos!
 
 
Nos sentimos todavía en la parte de la adaptación ya que aún no recorremos todo el año con lo que cada mes significa. Aquí estamos ahora en el verano que es el tiempo de más calor, sobre todo porque no hay lluvias, así que estamos sudando la gota gorda  (jejeje).
Hemos luchado por dejar la nostalgia por tantas cosas en México para centrarnos a poder valorar las cosas aquí. Si que estar toda la familia ha sido un reto, cada uno de los hijos lo ha vivido de manera diferente, alguno más fácil otro con mayor tristeza, pero que maravilla que el núcleo familiar se ha fortalecido mucho y hemos tenido oportunidad de ayudarnos, consolarnos y animarnos unos a otros.
A nivel de misión ha sido muy intenso ya que la formación de los matrimonios que se preparan para ser matrimonio misionero, ha implicado nuestra inversión de mente, corazón y fuerzas. Imagínense tener que dar temas, dirección espiritual, pautas de oración, acompañamiento en Inglés. ¡Uffff!!  La primera revisión de vida fue tan difícil tratar de comprender y compartir.
 

Hemos avanzado mucho y experimentamos una empatia y confianza de los matrimonios que solo puede ser fruto del Espíritu, de verdad que hemos comprobado que el lenguaje del amor se comprende en cualquier cultura y para ellos ha sido un gesto de amor muy grande que hallamos dejado todo en México por venir y estar a su servicio. A partir de cuaresma comenzamos a involucrarnos más en el apostolado con otras personas preparando los retiros para semana santa. 

El último mes ha sido una experiencia de entrega "por ellos", todos los días ocupados revisando charlas, testimonios, dinámicas. Preparando el esquema de retiro de Pascua para niños, adolescentes y adultos.
Hemos empezado a acompañar a la gente de la Familia Verbum Dei que necesita dirección espiritual porque están viviendo momentos muy difíciles a nivel personal. Algunos no se sentían dignos de dar las charlas o los temas. Son personas con mucha delicadeza espiritual.
Nuestra misión aquí es como animadores: es decir, motivamos y preparamos todo con los miembros de la Familia Verbum Dei, para que ellos lo den a las personas nuevas,  ellos nos lo dan a nosotros en Inglés para poderlo revisar y  después ellos lo puedan dar a las demás personas en bisaya que es su lengua materna y con la que todos se sienten mas cómodos.
 

La Pascua ha dado mucho fruto. Este fin de semana para la primera perseverancia, tuvimos la casa de apostolado casi llena, (no es muy grande pero estaba el ambiente festivo de las nacientes comunidades) un ambiente de familia muy bonito en donde por primera vez en esta comunidad se tuvo actividades de perseverancia con niños, adolescentes, jóvenes y adultos al mismo tiempo de manera simultanea. Que sorprendente es ver la fuerza de la palabra de Dios que después de un retiro de un fin de semana es capaz de transformar corazones, devolver sonrisas, hacer renacer la esperanza, motivar el perdón. 
 
Testimonios tan fuertes de jóvenes que llegan a abrazar y pedir perdón a sus padres, otro dejando una secta satánica, una más que renuncia a tener relaciones prematrimoniales aunque eso le cuesta una relación de noviazgo larga, parejas que se perdonan y están dispuestos a continuar. Estos frutos que da la fuerza de la palabra ahora hay que cuidarlos para que lleguen a ser frutos maduros.
 
La semana próxima comenzaremos una semana de ejercicios espirituales,  nos tocará acompañar un grupo y predicar pautas diarias junto con la revisión de oración. Como ven el tiempo de trabajo intenso ya está aquí y creo que estamos listos aunque todavía con miedo y con muchas limitaciones pero ponemos lo que tenemos y que Dios lo multiplique.
 
A nivel familiar entramos en una etapa de nuestra vida totalmente nueva y también todo un reto. Nuestros dos hijos mayores y son adultos y están buscando la mejor opción para desarrollarse en el ámbito que ellos han elegido como vocación y  profesión.  Dios ha sido muy bueno y nos ha concedido una beca completa para Alán en una de las universidades más importantes de Manila, ha sido todo un milagro porque es la primera vez que dan una beca a un estudiante extranjero ya que las becas solo se dan a Filipinos; pero Dios cuida de nuestros hijos y cumple las promesa, de que buscando nosotros el Reino todo se dará por añadidura. Esto cambiará nuestra dinámica familiar porque implica que el vivirá solo en Manila ya que nosotros continuamos con el curso de formación aquí en Mindanao al menos por 2 años más. Yael, está en discernimiento y buscando ahora la mejor opción. Por favor pedimos sus oraciones por él.
Estamos muy agradecidos con ustedes que han sido la expresión de la providencia de Dios y una clara invitación de su parte a dedicarnos a tiempo completo a la misión.  Muchas gracias de verdad que ha sido muy importante su apoyo, el cual seguimos pidiendo especialmente en estos momentos. Estamos seguros que Dios les manifestará su agradecimiento también.
Por nuestra parte oramos por ustedes frecuentemente y también los matrimonios en formación que saben que no sería posible nuestra estancia sin el apoyo de parte de ustedes. principalmente con sus oraciones, afecto y animo que nos dan.
 
Gracias de todo corazón y reciban un abrazo de cada uno de los miembros de nuestra familia.
 
Adriana y Poncho